Hoy sábado 23 de septiembre me llama la atención que Juan Manuel Serrat se haya vuelto antiindependentista, y es que la pela está por encima de delirios tribales, Juan Manuel sabe que si Cataluña se independiza sus intereses empresariales se van a la mierda. Así que no es por cordura nacional, es porque la pela es la pela. ¡¡Menos lobos Serrat!!
Hace días que quiero contaros esta hipotética situación, imaginad un sala de cine, teatro, o de lo que quieras, con 17 personas y un guardia civil. En un momento determinado uno de las personas se levanta con un cuchillo en la mano al grito de «voy a por ti, voy a clavártelo». Las 16 personas atónitas miran al guardia civil esperando que actúe. Éste les dice, el cuchillo es un objeto legal y aun no ha cometido el delito, sólo puedo sujetarle el brazo y quitarle el cuchillo… ¿y no piensa detenerlo? Gritó el personal. A lo que el guardia respondió, no, no puedo, aún no ha cometido ningún delito.
Bueno no hace hace falta transportar esta escena al referéndum, Rajoy sólo quiere detener el brazo del periodista Pelomocho –Carlos Puigdemont-.
Que no te cuenten historias los políticos, entra en un super con un cuchillo en mano amenazando y veremos si la Guardia Civil trata sólo de sujetarte el brazo o te enchirona inmediatamente.
A los políticos, a todos, les encanta tratar a los ciudadanos como gilipollas, incluso llegan a mearse encima del personal prometiéndoles que es lluvia. Lo triste es que la mayoría se lo cree.
Feliz finde, sed malotes y muy felices.
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Ahi les has dado don Juan, a Rajoy y a los del PP, solo quieren parar el referendum sin detener a los responsables de un delito contra España. Rajoy actua como el manso en la manada de delincuentes.
Ha puesto un ejemplo muy claro.
El tiempo pone a cada uno en su sitio y Rajoy no se va a librar. Gracias José Luis por tu opinión
Creeis que conseguireis las independencia cuando no la quiere ni la mitad del pueblo catalán.
Helena, te olvidas de un pequeño detalle, sólo es cuestión de tiempo que lo consigan, en dos o tres camadas más de niños educados en catalán y con unos símbolos identitarios diferentes del resto de España serán mayoría.